ITINERARIOS
 

 

Laguna de Bezas. "Laguna del Infante".

 

          Este itinerario es tal vez el más emblemático del pueblo. Nos permite conocer la Laguna de Bezas que, junto con la de Rubiales son ecosistemas de gran interés ecológico y paisajístico. La panorámica que se nos ofrece del pueblo y sus alrededores desde el alto el Toconar así como el variado bosque son sobrados motivos para hacer imprescindible este recorrido.

          Deberemos llevar agua y guardar el máximo cuidado con el monte, evitando cualquier tipo de fuego, la mayor parte del recorrido se hace por el pinar de rodeno. La duración estimada es de 2 h. 15´, sin dificultad alguna, con un máximo desnivel de 240 metros. Estupendo recorrido para hacerlo a pie.

 

Itinerario:

 

          Saliendo por el Barrio de Arriba, seguiremos las señales propias de este recorrido o las blanquirrojas del itinerario del GR-10.

          Partimos de la fuente y abrevadero para tomar el camino que desciende hasta el regajo donde después de pasar por debajo del puente encontramos un tablero de información de los recorridos “GR-10” y “PR” de la zona; enfrente El Toconar.

          Cruzando el arroyo en el lugar ocupado por el antiguo Puente de Tabla, El Pozo Salao, giramos a la izquierda; a la derecha nos conduciría al Barranco la Roya donde hay una monumental sabina Sabina Gorda de gratos recuerdos para los pequeños ahora mayores del lugar por los juegos desarrollados en ella y sus inmediaciones. El Barranco la Sierra, El Bricial y El Alto la Fuente. al fondo.

          El camino sigue por La Rambla de La Laguna para ir ascendiendo por el camino del Toconar, entre tierras de labor, la mayor parte de ellas en proceso de recolonización por el monte bajo.  En la vertiente opuesta de la Rambla de la Laguna está el camino de Las Casillas, posible motivo de otro recorrido.

          Al fondo quedan las piezas del Barranco La Laguna donde no hace tantos años se podían ver unas impresionantes nogueras.

          Serpenteando la empinada cuesta vamos contemplando el panorama del pueblo cada vez más espectacular con Sierra Carbonera y el Cerro los Cepos al fondo. En este punto ya las piezas de labor abancaladas por antiguos "paretones" de piedras van desapareciendo, el espliego, enebros, salvia, gamones, jedrea, tomillo, aliagas,  rebollos, sabinas y pudias han acaparado el suelo. Alcanzamos el Alto el Toconar y nos adentramos en La Huyela con las estribaciones del Bricial a la derecha, el Barranco la Huyela y el Alto de la Laguna al fondo. El rebollo y la encina dan paso al pino rodeno y su incondicional corte de estepas y brezo.

          Ya en pleno pinar, en una pequeña elevación en el recorrido, sale un camino a la izquierda que nos llevaría a los corrales de La Pasadilla; en la ladera de la derecha se encuentra La Cueva de la Tía Curra, de triste recuerdo pues sirvió de refugio para algunas familias del pueblo en la pasada guerra civil.

          Descendemos hacia la Rambla de la Pasadilla, a la izquierda el Vallejo de la pieza La Cresta. Un carril que nace a la derecha llega al camino del Saltillo.

          Cruzando la Rambla de la Pasadilla que al llegar al pueblo se llamará el Barranco la Laguna. Subimos hacia el Collao de la Laguna donde el pino rodeno, castigado con las incisiones que dejara el resinado, y la estepa da paso a la Sabina albar, algunas de ellas  impresionantes ejemplares centenarios, en la depresión se encuentra “La Laguna de Bezas o del Infante”, la oscilación en su nivel de agua nos refleja la variación climática de la sierra.

          Un carril a la izquierda nos lleva a La Loma y El Hoyo donde un corral se ha habilitado para vivienda y desde donde a través del Corral de los Gabrieles salimos a La Toconosa encontrando un aljibe, si seguimos llegaremos al Mojón Blanco donde está el antiguo repetidor de la televisión, desde ahí de bajada llegaremos a la carretera de Teruel; Bezas a un kilómetro.  De frente tenemos las casas de La Laguna, siguiendo el carril llegamos a la carretera de Tormón.  El Alto de La Laguna y Peña la Cruz a la derecha. Es un paraje idílico donde podemos encontrar tordejas, patos, garzas y cigüeñas; liebres, jabalís o ciervos; el Champiñón de los prados “Agaricus Arvensis”, corros de brujas “Marasmius Oreades” el Mizclo o rebollón “Lactarius Deliciosus” el inquietante “Clitocybe Cándida” o el estupendo “Pleurotus Eryngii”.

          El camino de vuelta lo hacemos por El Saltillo; tomamos el camino de la derecha volviendo a cruzar la rambla de la Pasadilla; el barranco de Los Vayerbosos y el Barranco La Mora son las primeras depresiones que encontramos en nuestro camino a la izquierda. A éste último se adentra un carril que nos lleva a la caseta donde se hiciera La Prueba; cuando dejó de resinarse con el sistema tradicional de arranque de viruta, se intentó hacer por medio de ácido, pero el sistema no prosperó, desapareciendo así el oficio de más arraigo en el pueblo.

          Llegamos al Saltillo, donde el barranco crea una pequeña cascada, la cuarcita paleozoica hace su aparición  encaramándose hasta la cima de la montaña, a la derecha El Calvillón con idéntica morfología.

          Avanzamos hasta El Rodeno donde los majadales y un antiguo caseto nos hablan de tiempos pasados, Las Cumbres al fondo. A través de las rocas de arenisca en forma de barrera natural, podemos ascender hasta Peña la Cruz por el Collao del Portillo.

          Tomaremos el carril a la derecha hasta llegar al cruce del Corral Quemao, a la izquierda Peña la Cruz, de frente Dornaque y Fuente Buena. Giramos a la derecha hasta alcanzar la carretera que nos conduce a Bezas. Siguiendo ésta o descendiendo al cauce del regajo, nos dejamos llevar por el fluir del agua alcanzando la cascada de la Balsa del Molino hasta llegar al pueblo.